Todos los generosos intentos de aproximar Metheny al flamenco han sido en vano... o casi.
A pesar de todo, los mejores guitarristas de la especialidad, desde Tomatito a Vicente Amigo (Querido Metheny), pasando por Santiago Lara (Flamenco tribute to Pat Metheny) han reconocido la influencia del maestro en su música pero sin que el de Missouri fuera más allá de declarar públicamente su agradecimiento, su respeto y un interés puntual de cercanía hacia el flamenco.
Algo así como meterse en el mar hasta las rodillas y salir sin sumergirse.
Cualquiera sabe lo que le diría Morente a Metheny para que se presentara en Granada con su familia y compartieran estudio y composición.
Si bien el trabajo de "Morente sueña la Alhambra" es como todo lo de Enrique, interesante, atrevido, desafiante y un tanto iconoclasta para desesperación de los puristas, lo de las dos colaboraciones con Metheny, especialmente "Generalife"son, bajo mi punto de vista, estratosféricas.
Ni el más optimista hubiera imaginado que la unión de los dos genios recreando un "collage" de versos de distintas procedencias, pudiera acabar con algo tan bello y con una química más sincera.
Metheny dijo en una entrevista poco después que nunca se lo había pasado tan bien colaborando con otro músico.
De Morente me quedo con la exclamación que le soltó a su familia cuando Metheny le confirmó su viaje a Granada. " ¡ Todo el mundo a la cocina, que viene mi amigo Patricio !"